Miércoles 11 de Octubre
Hoy tendría que haber sido el último día del curso Drácula y el Vampirismo en el Cine Fantástico, pero desgraciadamente no se ha realizado por falta de aforo. No se han matriculado el suficiente número de personas como para llevarlo a cabo y los que nos habíamos inscrito nos hemos quedado con la frustración. Al menos, nos queda el Cine y hoy se han podido ver películas de países tan exóticos para esto de la industria cinematográfica como es Indonesia. La directora Mouly Surya, que ha presentado Marlina Si Pembunuh dalam Empat Babak (Marlina, la Asesina en Cuatro Actos), una película hecha no con dos euros y medio sino con unos cuantos céntimos. Ella misma ha hablado de su cinta y ha contado lo difícil que es realizar algo en puntos tan deprimidos económicamente como es el pueblo en el que se ha rodado. Ayer hablaba de Black Hollow Cage. Creo que se me pasó decir que la película está estructurada en capítulos (cuatro, quiero recordar). Hoy de nuevo un guión se estructura en capítulos, cuatro, como es el caso de ésta Marlina, la Asesina en Cuatro Actos. En el guión colabora la misma directora, Mouly Surya, contándonos cómo una joven viuda que vive en una zona desértica indonesia es atacada y violada, cómo mata a su violador y cómo continua su vida. ¿Merece la pena? Sí, aunque sea para ver qué Cine hacen en países tan distantes como es Indonesia.
Laissez bronzer les cadavres!, una producción belga codirigida entre Hélène Cattet y Bruno Forzani. Cine experimental, exagerado, con ciertos toques de Cultura Pop (me ha recordado algunas películas de finales de los 60 y principios de los 70) con escenas de colorido lisérgico, fotos viradas a rojo, azul, amarillo...una película para verla en un entorno como es el Festival de Sitges por ser una obra rarita, con un una banda sonora curiosa por los ruidos que van trufando una historia caótica: encender un cigarrillo suena como si estuviera ardiendo un bosque, el crujido de las prendas de cuero que se retuerce al oído, los macro-primeros planos tanto de los personajes como de cualquier objeto, constantes a lo largo de toda la cinta. La historia nos cuenta un fragmento en la vida de una pintora que convive en unas ruinas con un antiguo amante, un escritor, unos amigos que se dedican a robar (oro)...un día, las cosas se complican y se suceden una serie de acontecimientos. Laissez bronzer les cadavres! no es para tirar cohetes, pero ahí está.
El plato fuerte del día (se ha pasado por la mañana y por la tarde) es la película holandesa Brimstone. Es del año 2016, está dirigida por Martin Koolhoven, que se encarga también del guión. La banda sonora está a cargo de Tom Holkenborg más conocido por el seudónimo de Junkie XL.
La historia se desarrolla en la América que comienza a ser habitada por europeos, en concreto con la colonización de inmigrantes llegados de Holanda. Es una historia gótica contada en cuatro capítulos muy bien engarzados porque el guión es francamente sólido. La banda sonora original está a la altura de la calidad de la cinta y la interpretación de actores y actrices es sencillamente espléndida: Guy Pearce, Dakota Fanning, la niña Ivy George...todos. Hay paralelismos que no sé si es casualidad o un homenaje velado a una obra como La noche del cazador, de Davis Grubb, novela de 1953 que adaptó al Cine en 1955 Charles Laughton.
No cuento más del guión porque no quiero hacer ningún tipo de "spoiler", sólo añado que, en las quinielas que apuestan por las posibles películas ganadoras del Festival, Brimstone junto con Thelma, comienzan a sonar como favoritas.
Brimstone. Cuando la estrenen, no te la pierdas.
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