miércoles, 11 de octubre de 2023

Cíclope 3.0 - 10-10-23


Burl Ives (1909-1995)

Cíclope 3.0 del martes 10 de octubre de 2023.
La foto de cabecera recoge un momento de descanso en el rodaje de la película The Spiral Road (Camino de la jungla) de 1962, dirigida por Robert Mulligan y protagonizada por Rock Hudson (1925-1985) y Burl Ives.  La instantánea, que recoge esos minutos de asueto, presenta una figura de físico prodigioso que bien podría ser un momento de intimidad en la existencia de Papa Noel o de Dios Padre.  El programa de hoy va a estar ocupado principalmente por esa segunda acepción, la de Dios Padre Creador.  No porque vayamos a escuchar composiciones de cantantes, músicos que definan sus creencias metafísicas o no, sino porque la figura del Señor está presente en diferentes manifestaciones de la música, ya sea como auto de fé o, sencillamente, como figura de referencia.  Vamos a comenzar esta edición de Cíclope 3.0 precisamente por el principio opuesto al Bien, es decir, el Mal, habitualmente identificado por la figura del Diablo.  La canción se titula así, The music of the Devil, la firma Graham Parker.


El mes que viene, en noviembre,  Parker, en la foto inmediatamente superior, cumplirá 73 años.  Su forma de hacer música viene de lejos, desde la década de los años 70 del siglo pasado.  
Después de cumplir la mayoría de edad, Parker realizó trabajos ocasionales que iban desde criar ratones y conejillos de indias hasta trabajar en una gasolinera.  Con respecto a la música, hasta ese momento, había tocado en varios grupos de pub rock desconocidos, incluida una banda de covers que había tocado en Marruecos y Gibraltar.  Comenzó a seguir seriamente una carrera musical a partir de 1975.  Ese año, Dave Robinson, uno de los cofundadores del nuevo sello independiente Stiff, escuchó una de las maquetas de Parker y le animó a continuar de una forma seria ayudándolo a formar una banda de acompañamiento llamada The Rumour.


Graham Parker & The Rumour

En primer plano, Graham Parker a la izquierda, con gafas oscuras; a la derecha, con chaqueta clara, Martin Belmont, el guitarrista que ha acompañado a Parker desde el principio.  
Los comienzos de nuestro hombre estuvieron marcados por ese sesgo de perdedor que tienen muchos músicos y autores: fue un punto de referencia para la New Wave que afloró desde mediados los años 70 con representantes como Elvis Costello, Joe Jackson y Paul Weller, pero fue eclipsado, por ejemplo, por Costello, que publicaba su primer LP después de que lo hiciese Parker pero que encontró un apoyo más sólido por parte de la discográfica que lo publicó de lo que se encontró Parker con la suya.
El caso es que han pasado los años y este hombre sigue en activo.  Ha vuelto este año de 2023 con una nueva entrega titulada Last Chance To Learn The Twist

Desde sus inicios, Parker ha desarrollado una vigorosa fusión de Rock & Roll impulsivo y Folk-Rock confesional, resaltando una pasión indignada, un sarcasmo mordaz y una ira controlada.  Ha firmado álbumes con su nombre y apellido, amparado por la compañía del grupo The Rumour y, desde hace unos años, por el proyecto The Goldtops, como es el caso de su último trabajo publicado el pasado 8 de septiembre.  Por cierto en el combo The Goldtops está su inseparable guitarrista Martin Belmont.  Parker ha estado encontrando su camino de regreso al sonido de Pub Rock que inspiró sus primeros trabajos.  En este nuevo álbum de 2023, suena mayor y más sabio en comparación con algunos trabajos publicados últimamente, pero nunca suena cansado o desgastado porque es un artista vital dotado de un talento brillante que resplandece.  Todavía tiene ese toque que lo hace funcionar de manera diferente como es el caso del primer tema que escuchamos de su último trabajo, la canción The Music of the Devil, La música del diablo.

Vamos a saltar ahora hacia atrás en el Tiempo, vamos a recuperar el primer álbum de Graham Parker editado bajo su nombre y apellido, aquel disco cuyo sello discográfico no supo qué hacer con él, dónde incluirlo, cómo promocionarlo.  Se titula Howlin' Wind, veía la luz en 1976 e incluye canciones como esta: Don't Ask Me Questions.  
Esta canción que acaba de sonar en el programa es el punto de fuga para que el Cíclope realice la selección musical de esta edición.  Más que la canción completa es el estribillo que dice:

Hey Lord, don't ask me questions

Hey Lord, ain't no answer in me


Señor, no me hagas preguntas

Señor, yo no tengo respuestas


El Señor, Dios, Dios Padre Creador...una de las figuras más utilizadas, junto con el Diablo, el Demonio, el Mal, en la Historia de la Música Popular sin olvidar a la Música de estructura Académica.  Así que el Cíclope se ha dedicado a buscar algunas canciones en el campo del Rock relacionadas con el concepto Dios, Señor.  Y comienza por registrar una cuyo título es específicamente claro y transparente como la luz del día: Presence of the Lord.  La firma Blind Faith.


Blind Faith fue la banda que presentó al mundo la noción de Supergrupo de Rock, un combo formado por varios músicos que ya habían alcanzado popularidad y elogios de la crítica antes de unir fuerzas para hacer música.  Son rostros conocidos los que aparecen en la foto: de izquierda a derecha, Eric Clapton, Steve Winwood, Ginger Baker y Rick Grech Blind Faith también estableció, sin saberlo, una de las características más comunes de los supergrupos: la mayoría presentaban suficientes músicos con currículums y egos fuertes para que los conflictos internos fueran casi inevitables y, como consecuencia, generalmente se desmoronaban a la primera de cambios.  El caso que nos ocupa no iba a ser menos: un álbum que resultó un éxito, una gira internacional de conciertos que dejó unas ganancias altas y productivas...nada de eso fue suficiente.  El grupo logró ascender y caer en menos de un año y, finalmente, resultó ser una nota importante, curiosa en las carreras de los cuatro gigantes del rock británico: Clapton, Winwood, Baker y Grech.

Blind Faith nació, por un lado, después de que Cream se disolviera como proyecto en parte porque el guitarrista Eric Clapton no estaba seguro de la dirección creativa del grupo, pero también porque al bajista Jack Bruce y al batería Ginger Baker les resultaba casi imposible estar de acuerdo en algo.  Mientras tanto, el vocalista y teclista Steve Winwood había fundado Traffic después de dejar el Spencer Davis Group para explorar una aventura de aires psicodélicos mezclada con algo de jazz y blues.  Tuvieron problemas para negociar sus egos y encontrar el equilibrio entre la composición y el trabajo instrumental dentro de la banda, y en 1969, Traffic desapareció para volver a unirse poco después.

Clapton y Winwood eran amigos, se admiraban mutuamente.  Ya habían tocado juntos en varias ocasiones, por lo que cuando ambos se vieron en libertad tras la ruptura de sus respectivos grupos, investigaron la idea de formar una banda juntos.  Un día, Ginger Baker pasó por los estudios donde Clapton y Winwood estaban trabajando sobre un material nuevo.  Baker no dijo nada.  Encendió un cigarro, se quedó escuchando y en un momento dado se sentó a tocar la batería.  A Clapton y Winwood les gustó la forma en que la ambiciosa percusión de Baker se fusionaba con sus canciones nuevas que exploraban una mezcla más sutil de Blues y R&B de lo que había hecho Cream.  Sin embargo, Clapton desconfiaba de reunirse de nuevo con Baker: ¿otra vez las broncas porque no se ponían de acuerdo en tal o cual aspecto?, ¿otra vez...?  Fue el entusiasmo de Winwood ante la idea lo que prevaleció y Baker se unió a la banda.  El nombre del grupo se le ocurrió a Clapton tras escuchar los argumentos positivistas de Winwood que confiaba plenamente en la buena marcha del proyecto.  Para el guitarrista, su amigo tenía una auténtica Fe Ciega.  El grupo se convirtió en cuarteto con la incorporación del bajista Rick Grech, que había estado tocando con la célebre banda británica Family.  Tras la disolución de Blind Faith pasaría a las filas de los renovados Traffic.



Blind Faith grabó un LP de título homónimo.  El disco se publicó en Europa y en Estados Unidos pero con carpetas diferentes.  La cubierta inglesa es la foto de la derecha.  En Estados Unidos y en España, esa foto de una adolescente en topless fue censurada.  En su lugar esa instantánea fue sustituida por una foto del grupo



Portada americana y española.  Aquí se publicó el LP si no fue en 1969 fue a principios de los 70.  Se editó y desapareció.  Hubo que esperar a la década de los 80, a principios, para que se reeditara y entonces sí, ya con la cubierta original.

Uno de los cortes de este espléndido disco sería uno de los más programados en las emisoras de FM de la época, el tema Presence of the Lord que es el que selecciona el Cíclope.

Del R&B de finales de los 60 al R&B elaborado en pleno siglo XXI con esta banda, North Mississippi Allstars



North Mississippi Allstars comenzaron como un trío, después fueron cuatro miembros, pasaron a cinco...pero de base, es un dúo formado por los hermanos Luther y Cody Dickinson, izquierda y derecha en la foto anterior.  Ambos tocan la guitarra pero quien la maneja fundamentalmente es LutherCody es más prolífico con los instrumentos y lo mismo te lo encuentras sentado a la batería que manejando una tabla de lavar como instrumento de percusión.  El proyecto, cuando comenzó a mostrar de lo que eran capaces sus integrantes, ofrecieron una lectura nueva y enérgica de la música de su región de Hill Country: Delta Blues, Bluegrass, mezclado todo con Hip-Hop, Funk, Ragtime y Rockabilly.  Los hijos del legendario productor de Memphis, Jim Dickinson, nacieron en el condado de Fayette, Tennessee, y la familia se mudó más tarde al norte de Mississippi, donde los niños absorbieron el sonido Country-Blues de la región.  Desde su debut en el panorama de la música grabada allá por la primavera del año 2000, North Mississippi Allstars han seguido ofreciendo una asombrosa diversidad de estilos y colaboraciones bajo un paraguas de raíces sin complejos.


En el año 2001, el 9 de octubre, se publicaba 51 Phantom, un larga duración en el que de nuevo el grupo consigue que el blues suene tan enérgico, estridente y terroso como ha sonado en años.  La figura del Dios bíblico, el Señor, está presente en la temática de los textos del góspel, del blues como es este caso: Lord Have Mercy, Señor ten piedad.  A título anecdótico, North Mississippi Allstars es uno de los grupos actuales favoritos de Mike Scott, el vocalista y alma mater de The Waterboys.
Del área norteamericana de Mississippi nos movemos al viejo continente, Europa, en concreto a las frías tierras de Suecia donde nos encontramos el arrebato de la música caliente de un quinteto de riffs de guitarras abrasivas.  Responden al nombre de The Hellacopters


La banda se formó en 1994 en Estocolmo y grabaron por primera vez en 1996.  Estuvieron en activo desde entonces hasta el año 2008, fecha en la que se separaron para volver a reunirse en el año 2016 hasta nuestros días.

Son miembros de un proyecto sueco como ha quedado dicho, pero tocan Rock & Roll norteamericano en la línea de Grand Funk Railroad, Bachman-Turner Overdrive, MC5 The Stooges.  No tienen empacho en demostrarle mostrarle al mundo que la música Rock todavía está viva con su pura intensidad, sin añadidos.  Ese poder puro y duro está presente en Grande Rock, el álbum que se publicaba el 8 de junio de 1999, sin que se encuentre en ese vinilo ni un solo indicio de Rock Alternativo o Hair Metal de los 80, tan solo herencia desarrollada del Rock de los 70 en temas como The Devil Stole the Beat from the Lord, El Diablo le robó el ritmo al Señor.
Del Rock de principios, de las formas rockerizadas y abrasivas de las guitarras eléctricas, al otro lado de la estética: de la tradición a la experimentación con un músico capaz de convertir la señal de una emisión en Irán de radio de onda corta en una canción de amor.  Su nombre real era Holger Schüring, nacía en la ciudad de Danzig, actual Gdansk, Polonia el 24 de marzo de 1938 y fallecía el 5 de septiembre de 2017 en Weilerswist, cerca de Colonia, en Alemania.  Se le conoció por su apodo artístico, Holger Czukay,

por eso y por ser  miembro fundador del influyente grupo de krautrock Can.  Fue una de las figuras fundamentales de la cultura underground de su época.  A lo largo de su larga y expansiva carrera, Czukay cerró con éxito la brecha entre la música Pop y la Vanguardia, siendo pionero en el uso de samples y explorando la importancia de la música mundial en la cultura occidental.
Después de enamorarse de la música a una edad temprana, pasó sus años de formación estudiando para ser compositor y director, pero sus ideas frecuentemente eran demasiado radicales para los gustos convencionales.  Después de ser descalificado de un festival de jazz por su música inclasificable, más tarde fue expulsado de la Academia de Música de Berlín por una insolencia artística similar.  Bajo la tutela del compositor de vanguardia Karlheinz Stockhausen, Czukay continuó refinando sus ideas y pronto se convirtió en profesor.  A través del estudiante Michael Karoli, obtuvo su primer contacto con artistas como los Beatles, los Rolling Stones, la Velvet Underground.  Se centró en la guitarra bajo
y se asoció con Karoli, su compañero protegido de Stockhausen.  Dentro del ambiente donde se movían conocieron a Irmin Schmidt, otro estudiante formado por las ideas y disciplina de Stockhausen, György Ligeti y John Cage.  Se les unió el batería Jaki Liebezeit y el vocalista estadounidense Malcolm Mooney.  A principios de 1968 formaron el grupo Inner Space que rápidamente renombraron como Can.  Después vendrían más cambios, etcétera, etcétera.  

Centrándonos en la figura de Czukay, Movies, de 1980, el primer trabajo en solitario después de la disolución de Can encuentra al bajista explorando temas de rock progresivo con instrumentación variada, letras orientadas a canciones y muestras de medios de cine, televisión y onda corta.  Fue la utilización de los samples lo que puso a Czukay en la misma categoría que David Byrne o Brian EnoMovies es un álbum repleto de texturas agradables y divertidas, con poco de la oscuridad con la que Can jugaba.  El Cíclope extrae una petición de este trabajo, el tema Oh Lord Give Us More Money, Oh Señor, danos más dinero.
Entramos en la recta final del programa de hoy.  Nos queda tiempo para escuchar unos cuatro temas con la referencia de la figura del Señor en el texto de las canciones.  Uno de los mejores trabajos de Peter Hammill en solitario es el álbum The Future Now.



Se grabó entre el 18 de marzo y el 26 de abril de 1978, se publicaba a finales de ese año.  El resultado final es uno de sus mejores y más desconcertantes discos.  Hay hermosas baladas de piano, extraños experimentos e himnos de rock, algo normal en un artista tan polifacético que, por cierto, se afeitó la mitad del vello facial para la llamativa foto de portada.  No es un fotomontaje, es real.
Los créditos del disco son austeros: David Jackson en el saxofón, Graham Smith en el violín (venía de colaborar con Hammill en el álbum de 1977 Over; con Van Der Graaf Generator en el álbum The Quiet Zone/The Pleasure Dome, también de 1977); Peter Hammill voz, instrumentos, letras, producción.  El disco contiene todo un auto de fé sobre Dios y el Estado Vaticano titulado Mediaeval y cuya letra creo que merece la pena que conozcas.  Dice así:
Dios vive en la catedral,
al menos es lo que dice el arzobispo.
¡Sed súbditos de la Iglesia!
¡Todo el poder al Estado de la Ciudad del Vaticano!
Las llaves de oro de la catedral
encajan bien con la sotana del obispo.
Él vive una vida espiritual de riqueza material.
¿Son las cosas tan diferentes ahora?
Ah, sí, ahora:
Guardad vuestras oraciones para el futuro y rezad por el futuro.
Oh, Dios ya se fue de la catedral,
ahora impera el otro poder.
Podemos empaquetarlos en los libros de historia, pero la Edad Media no se acabará y la respuesta a nuestras oraciones es un valium junto a la cama.
Ahora escuchamos a los expertos en la televisión, ahora tenemos fe en la ciencia y el progreso y sólo hacemos el amor de rodillas.
Y los extraños siguen encerrados en los asilos, y el Papa estéril prohíbe el uso de la píldora anticonceptiva.
Y los ricos siguen enriqueciéndose,
y los pobres siguen pagando por ellos,
y Dios vive en un refugio subterráneo,
esperando el día del Juicio Final.
Si no abrimos los ojos muy pronto
la Edad Media se quedará aquí para siempre.

El tema está resuelto con tan solo dos elementos: la voz de Hammill, grabada en diferentes pistas para conseguir una polifonía rica en matices y una guitarra eléctrica que resuelve la salida.  Muchos oyentes han querido reconocer la guitarra de Robert Fripp pero no intervino en esta grabación.  Ha colaborado en varias ocasiones con nuestro hombre pero no en esta ocasión.

Saltamos de los años finales de los 70 a la primera década del siglo XXI.  Año 2006, fecha de publicación de un trabajo amplio, extenso y muy interesante titulado Orphans: Brawlers, Bawlers & Bastards, Huérfanos: luchadores, charlatanes y bastardos, un álbum triple firmado por Tom Waits.



 

 

El álbum incluye una colección de 24 rarezas y 30 canciones nuevas de Tom Waits, y está separado en categorías: el primero, bajo el título de Brawlers (Luchadores  incluye canciones de Rock y Blues; el segundo, con el título de Bawlers (Charlatanes), recoge baladas y melodías más melancólicas; finalmente el tercer disco, Bastards (Bastardos), recopila canciones experimentales y piezas habladas.  Tiene un trabajo minucioso el seleccionar un gran montón de canciones.  Es como tener un gran montón de material para una película que hay que dejar resumida en 90 minutos.  O un montón de textos que ensamblar para dejar una narración mínimamente coherente, organizada de un modo significativo.  En el caso de la música hay que ver en perspectiva todo el material de modo que tenga una experiencia sonora equilibrada.  Hay una división temática, y también una división de ritmo.  Las fuentes de las canciones tuvieron diferentes puntos de fuga y también fueron escritas en diferentes momentos.  Tiene un mérito conseguir hacerlas trabajar juntas.
Resumiendo, Orphans: Brawlers, Bawlers & Bastards es una colección de tomas descartadas, rarezas, melodías de bandas sonoras y compilaciones exclusivas, algunas de las cuales sobreviven aquí en una nueva forma.  El tema que recupera el Cíclope es un corte del grupo Brawlers, la canción Lord, I've Been Changed, Señor, he sido cambiado

un tema tradicional que interpretó el cantante y músico norteamericano John P. Hammond, en la foto, en 2001 en su álbum Wicked GrinHammond ha tenido una larga amistad con Tom Waits y ese disco del año 2001 consta enteramente de composiciones de Waits, excepto el tema reseñado.  Waits tocó la guitarra, cantó coros en el álbum y también fue su productor.
En la recta final de este programa sobre canciones que hacen alusión a Dios, al Señor como figura retórica o imagen a la que dirigir preguntas sin respuesta nos quedamos con el que fue motor de la banda australiana The TriffidsDavid McComb.


McComb (1962-1999) en el centro de la foto, con los brazos cruzados, formó la banda Dalsy en la escuela secundaria.  De esos Dalsy surgiría en 1980 la banda The Triffids.  Existieron como grupo hasta 1989, a partir de esa fecha McComb continuaría en diferentes proyectos hasta que en la década de los 90 empezó a gestar una colección de canciones que aparecerían en formato de disco en 1994 bajo el título Love of Will.


El disco se grabó y mezcló entre los meses de junio y agosto de 1993 y vio la luz en el mes de marzo de 1994.  Nunca tuvo suerte 
McComb.  Aunque fue un músico respetado no consiguió alcanzar un status de ventas considerables como para sentir que podía vivir con holgura de la música.  Pero, ¿fue eso lo que quería?  ¿Perseguía ser un superventas?  Su forma de realizar los arreglos de las canciones que componía, su voz, su manera de cantar, sus canciones...no están hechas para el consumo inmediato.  De hecho pretendía que sus composiciones no fueran flor de un momento sino que perdurasen por lo menos unos años.  Eso de la canción tarareable que se olvida al mes...no, eso no era música ni nada parecido.  De su único álbum en solitario el Cíclope saca un tema que habla del Señor, The Lord Burns Every ClueEl Señor quema cada pista (o cada clave).
Y como punto y final, una metáfora del habitat del Señor, el Paraíso.  Quien la plantea es David Byrne, alma, motor y fuerza de Talking Heads.

El Paraíso, en inglés, se dice Heaven, y según Byrne, el Paraíso es un lugar donde nunca ocurre nada.  La metáfora está en la comparación que hace del lugar: Heaven es el nombre de un bar donde nunca sucede nada.


Heaven es uno de los cortes que se incluyen en el álbum Fear of Music, firmado en 1979, el tercer LP de la banda que contó con la prestigiosa firma de Brian Eno no sólo en la producción sino también en los teclados e inclusive haciendo coros.
Con Talking Heads terminamos.
Espero que te haya gustado el programa.
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