El Ojo del Cíclope |
Cíclope 3.0 edición del martes 12 de febrero de 2019, programa número 234 y fecha de cumpleaños porque el Cíclope cumple 5 años en antena en la sintonia de Radio Tomares. Gracias a Pablo Franco y a José Antonio Granero, Especialistas de Sonido y Control, cuya labor profesional, colaboración y sugerencias son imprescindibles para que este niño grande que es el Cíclope, siga su andadura estereofónica a través de la Radio.
Sin más, comenzamos el programa de hoy recuperando a una banda mitad australiana mitad neozelandesa fundada en 1985 en Melbourne, en el país de los canguros: Crowded House.
Crowded House |
La base, la columna vertebral del grupo, fue el compositor, guitarrista y cantante de origen neozelandés Neil Finn (en la foto, el tercero por la izquierda), un hombre comparado con The Beatles y especialmente con Paul McCartney, por su extraordinaria facilidad para componer canciones de una riqueza melódica bastante marcada. El Cíclope extrae de un disco de Crowded House de 1993, Together Alone, una de esas composiciones francamente hermosas firmada por Finn: Private Universe.
Y de los originales a una versión de uno de sus temas más conocidos: Don't Dream It's Over. Originalmente incluido en el primer álbum de la banda bautizado con nombre homónimo en 1986, años después, en 2002, la banda/dúo conocida como Sixpence None The Richer, hicieron una versión blanda, aún más calmada de lo que era el original. La conocimos un año antes, en 2001, cuando se proyectó en televisión la primera temporada de la serie Smallville, que narra los inicios, la adolescencia de Clark Kent, más conocido como Superman, en la localidad de Smallville.
Sixpence None The Richer, originales de Texas, asentados en Nashville, Tennessee, es (o fueron) fundamentalmente un dúo: Matt Slocum, guitarrista, y Leigh Nash, vocalista. Sacaron el nombre del dúo a raíz de la lectura del ensayo Mero cristianismo original del autor irlandés C.S. Lewis.
Él y ella se conocieron en una iglesia, en una reunión de jóvenes cristianos, esas típicas asambleas de grupos de catecumenado que plantean cuestiones como: ¿Qué espera Jesús de mi? Con esas premisas se iban casa por casa predicando la palabra de los Evangelios. En los textos de sus canciones son constantes las alusiones al cristianismo, a la religión y al sentido de la vida siempre y cuando esté proyectada hacia la ética y moral cristiana. Esto fue algo que trabajó en contra del interés por su obra. La última vez que se supo del proyecto Sixpence None The Richer fue en el año 2012.
Pero no todo está perdido. A veces aparece alguien que es capaz de sacar lo mejor de alguien que se anda un poco perdido entre laberintos mentales. Es el caso de Leigh Nash, la vocalista de Sixpence None etcétera. Un buen día, un músico canadiense llamado Nowell Rhys Fulber, más conocido por el apodo artístico Conjure One, contactó con Nash. Hablaron y no se sabe cómo se entabló cierta química entre ambos, tanta que en el año 2015 Conjure One lanzaba un disco titulado Holoscenic que incluía la voz de Leigh Nash en un tema que nos trae el Cíclope: Under The Gun.
Sixpence None The Richer, originales de Texas, asentados en Nashville, Tennessee, es (o fueron) fundamentalmente un dúo: Matt Slocum, guitarrista, y Leigh Nash, vocalista. Sacaron el nombre del dúo a raíz de la lectura del ensayo Mero cristianismo original del autor irlandés C.S. Lewis.
Él y ella se conocieron en una iglesia, en una reunión de jóvenes cristianos, esas típicas asambleas de grupos de catecumenado que plantean cuestiones como: ¿Qué espera Jesús de mi? Con esas premisas se iban casa por casa predicando la palabra de los Evangelios. En los textos de sus canciones son constantes las alusiones al cristianismo, a la religión y al sentido de la vida siempre y cuando esté proyectada hacia la ética y moral cristiana. Esto fue algo que trabajó en contra del interés por su obra. La última vez que se supo del proyecto Sixpence None The Richer fue en el año 2012.
Sixpence None The Richer |
Pero no todo está perdido. A veces aparece alguien que es capaz de sacar lo mejor de alguien que se anda un poco perdido entre laberintos mentales. Es el caso de Leigh Nash, la vocalista de Sixpence None etcétera. Un buen día, un músico canadiense llamado Nowell Rhys Fulber, más conocido por el apodo artístico Conjure One, contactó con Nash. Hablaron y no se sabe cómo se entabló cierta química entre ambos, tanta que en el año 2015 Conjure One lanzaba un disco titulado Holoscenic que incluía la voz de Leigh Nash en un tema que nos trae el Cíclope: Under The Gun.
Leigh Nash |
Conjure One, o lo que es lo mismo, Nowell Rhys Fulber, es canadiense, de Vancouver, en la Columbia Británica. Es un hombre que creció rodeado de música, un muchacho que compraba discos de Dead Kennedys y que un buen día cambió el chip mental cuando escuchó el álbum Homosapien de Pete Shelley. Los teclados, los sintetizadores, le pusieron la música interior bocabajo. Desde entonces, la música electrónica sería su razón de ser, formaría parte del proyecto Delerium y comenzaría una carrera en solitario que le ha hecho colaborar con los músicos e intérpretes más dispares como es el caso de la vocalista de Sixpence None The Richer. De cómo se puede transformar una forma para llegar a otra, buscando siempre el lado brillante, positivo de esa transformación, da cuenta un tema grabado también con Leigh Nash pero anterior a ese Under The Gun que hemos escuchado. Con ella grababa en el año 2013 un álbum titulado Reasons To Disturb. Educadamente, Rhys Fulber le pidió a Nash que dejara a un lado su proselitismo religioso. Que si quería rezar antes de grabar no había problema alguno, pero que en el trabajo creativo, por favor, dejara a un lado su proselitismo religioso. Que se relajara y que cantara sacando lo mejor de ella misma. Y surgió Inside My Haunted Head, un tema que suena en el programa y que merece la pena ser escuchado.
Nowell Rhys Fulber más conocido como Conjure One |
De la música electrónica de Conjure One a otra forma de entender esa estructura, la que realizan el dúo de origen británico Ultramarine.
Resulta difícil clasificar con una etiqueta la música que realiza este dúo porque en el tejido de sus composiciones convergen diferentes influencias: desde lo que se conoció en los años 70 como Sonido Canterbury, con grupos como Caravan o Soft Machine, por citar dos nombres, hasta la música electrónica más actual. Surgen como Ultramarine en 1989, en Canterbury, Kent, Inglaterra. El dúo lo forman Ian Cooper (izquierda, en la foto superior) y Paul Hammond. Grabaron regularmente a lo largo de la década de los años 90 y estarán parcialmente ausentes en la primera década del siglo XXI. Parcialmente porque aunque no han estado juntos sí han trabajado en la Música, ya sea como productores o como músicos de sesión, siendo como son multinstrumentistas.
Vuelven a trabajar con el nombre Ultramarine a partir de 2010. EPs, Mxs, y en el año 2013 larga duración nuevo aunque lo más nuevo data del año pasado, de 2018, un álbum titulado Signals Into Space que es el que hoy traemos al programa.
El disco, editado por el prestigioso sello discográfico belga Los Discos del Crepúsculo cuenta con una triple colaboración: la del saxofonista británico Iain Ballamy, que pone ese aire de Sonido Canterbury, el percusionista Ric Elsworth que se encarga también del vibráfono y por último una invitada de lujo, Anna Domino. Llevaba tiempo sin dar señales de vida esta mujer nacida en Japón, en Tokio, ciudadana de un montón de ciudades europeas y norteamericanas (se asentó en Nueva York durante mucho tiempo) y que recaló al final en Bélgica, en concreto en Bruselas, donde encontró el amor. Domino se encarga de las letras de cuatro canciones que aparecen en el disco. De las letras y de la voz. De las cuatro canciones nos quedamos con una, los otros cortes que escuchamos del último disco de Ultramarine son instrumentales.
Entre los temas de Ultramarine y después de la canción cantada por ella recuperamos el ayer de ésta mujer cuyo nombre real es Anna Virginia Taylor. Se dio a conocer en 1984 con un Mini-LP editado por la casa discográfica belga Les Disques Du Crépuscule titulado East & West que incluía una versión balanceante de un tema original de Aretha Franklin, Land of my Dreams.
Ultramarine |
Resulta difícil clasificar con una etiqueta la música que realiza este dúo porque en el tejido de sus composiciones convergen diferentes influencias: desde lo que se conoció en los años 70 como Sonido Canterbury, con grupos como Caravan o Soft Machine, por citar dos nombres, hasta la música electrónica más actual. Surgen como Ultramarine en 1989, en Canterbury, Kent, Inglaterra. El dúo lo forman Ian Cooper (izquierda, en la foto superior) y Paul Hammond. Grabaron regularmente a lo largo de la década de los años 90 y estarán parcialmente ausentes en la primera década del siglo XXI. Parcialmente porque aunque no han estado juntos sí han trabajado en la Música, ya sea como productores o como músicos de sesión, siendo como son multinstrumentistas.
Vuelven a trabajar con el nombre Ultramarine a partir de 2010. EPs, Mxs, y en el año 2013 larga duración nuevo aunque lo más nuevo data del año pasado, de 2018, un álbum titulado Signals Into Space que es el que hoy traemos al programa.
Ultramarine - Signals Into Space - 2018 |
El disco, editado por el prestigioso sello discográfico belga Los Discos del Crepúsculo cuenta con una triple colaboración: la del saxofonista británico Iain Ballamy, que pone ese aire de Sonido Canterbury, el percusionista Ric Elsworth que se encarga también del vibráfono y por último una invitada de lujo, Anna Domino. Llevaba tiempo sin dar señales de vida esta mujer nacida en Japón, en Tokio, ciudadana de un montón de ciudades europeas y norteamericanas (se asentó en Nueva York durante mucho tiempo) y que recaló al final en Bélgica, en concreto en Bruselas, donde encontró el amor. Domino se encarga de las letras de cuatro canciones que aparecen en el disco. De las letras y de la voz. De las cuatro canciones nos quedamos con una, los otros cortes que escuchamos del último disco de Ultramarine son instrumentales.
Anna Domino |
Entre los temas de Ultramarine y después de la canción cantada por ella recuperamos el ayer de ésta mujer cuyo nombre real es Anna Virginia Taylor. Se dio a conocer en 1984 con un Mini-LP editado por la casa discográfica belga Les Disques Du Crépuscule titulado East & West que incluía una versión balanceante de un tema original de Aretha Franklin, Land of my Dreams.
East & West - 1984 |
Un proyecto en el que está involucrada esta mujer es Snakefarm, un dúo compuesto por Anna Domino y su marido, el músico belga Michel Delory. El dúo se presentó en 1998 con una colección de canciones tradicionales norteamericanas sometidas a un tratamiento que las convierten en algo completamente distinto a su origen. El álbum se titula Songs From My funeral y le siguió otro trabajo, My Halo At Half-Light, en el año 2011. El Cíclope entresaca un tema del primer disco de Snakefarm.
Michel Delory y Anna Domino, Snakefarm |
Como curiosidad, Michel Delory pertenece a una banda belga de culto, los oscuros y siniestros Univers Zéro, un grupo de rock vanguardista que existe desde mediados los años 70 y que llegan hasta nuestros días. Para promocionar la imagen del grupo utilizaban fotos tan divertidas como la que ves a continuación.
Estábamos escuchando al dúo británico Ultramarine. Después Anna Domino y el proyecto Snakefarm. Hemos vuelto a la música de Ultramarine y cerramos con música electrónica a cargo de un dúo también británico, Orbital.
Univers Zéro |
Estábamos escuchando al dúo británico Ultramarine. Después Anna Domino y el proyecto Snakefarm. Hemos vuelto a la música de Ultramarine y cerramos con música electrónica a cargo de un dúo también británico, Orbital.
Orbital |
Dos hermanos, Phil (izquierda) y Paul Hartnoll, de Sevenoks, Inglaterra, forman este dúo de música eminentemente electrónica. El nombre de Orbital está tomado de la autopista de circunvalación del área metropolitana de Londres, la autopista M25, que fue clave en los inicios de la escena Rave en el sur-este de Inglaterra durante los principios del Acid-House. Orbital fue uno de los nombres clave de la electrónica británica durante la década de los 90. Una de sus señas de identidad, y por la que fueron particularmente conocidos en sus comienzos, son sus improvisaciones en directo. Han participado en bandas sonoras de películas como El Santo y Horizonte Final.
Orbital en plan ciclópeo |
Espero que te guste el programa.
Enlace al programa:
http://www.radio.tomares.es/index.php/blog/ciclope-30-12-02-19
Enlace al programa:
http://www.radio.tomares.es/index.php/blog/ciclope-30-12-02-19
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