jueves, 14 de diciembre de 2023

Cíclope 3.0 - 12-12-23


Parque Zoológico de Barcelona - 1959

Cíclope 3.0 del martes 12 de diciembre de 2023.  Comenzamos esta edición siguiendo un rastro de Cine, un compositor, una banda sonora, y para ello nos remontamos hasta 1968, año de la publicación del primer LP de un grupo norteamericano que respondían al simple nombre de The Band.




Mirando a través del ojo del Cíclope nos podemos remontar hasta 1958, los orígenes de The Band, cuando un rockero nacido en Arkansas, Ronnie Hawkins, formó una banda de acompañamiento que incluía a su paisano Levon Helm.  El proyecto se bautizó con el nombre de Ronnie Hawkins & the Hawks, y con el paso de los meses llegaría a convertirse en el origen de lo que se conocería como The Banduno de los grupos de rock más populares e influyentes del mundo, que supieron fusionar el pasado y el presente musical.  Su forma de hacer música reflejó las influencias del country, el blues, el folk y otras manifestaciones de música de raíz estadounidense de una manera fresca, orgánica e innovadora, y mostró una madurez creativa que fue una revelación en la era psicodélica.  Fueron un grupo serio capaz de diversificarse y disfrutar, con alegría, con lo que estaban haciendo, tanto es así que Bob Dylan, el día que alcanzó el punto en el que se cruzaban las estructuras e ideas del Folk con las maneras libres del Rock, entró en conversaciones con los miembros del proyecto y se convirtieron en el combo de acompañamiento del recién electrificado Dylan.


Como The Band estuvieron activos entre 1968 y 1976.  En el 68 publicaban su primer LP titulado Music From Big Pink (la carpeta la foto a la izquierda).  Big Pink era el nombre de una propiedad que tenía el grupo en la localidad norteamericana de Woodstock.  En el sótano de esa casa es donde se grabaron las demos, las canciones con Dylan que aparecerían en formato de disco en 1975 con el nombre de The Basement Tapes.  Pero no nos despistemos, estamos en el año 1968.  Desde esa propiedad de Big Pink, The Band elaborarían sus dos primeros álbumes de éxito:  Music From Big Pink, 1968 y The Band, 1970.  Nos quedamos con un corte del primer trabajo, un tema titulado The Weight.


Desde los inicios el proyecto contó con un músico clave para el desarrollo de las ideas, ese hombre es el que aparece en la foto: Robbie Robertson.  Primero guitarra bajo para inmediatamente ocuparse de la guitarra de ritmo, Robertson se convirtió en el motor, el alma de The Band.

En 1976, la banda se estaba  desmoronando con los miembros involucrados en sus propios intereses y vidas y poco trabajo en directo.  Apareció un álbum, The Best Of, y emprendieron una gira, pero los días como grupo, como colectivo, estaban contados.  Robertson estuvo dándole vueltas en la cabeza durante la gira y tomó la decisión de organizar un concierto de despedida en la sala Winterland de San Francisco, el Día de Acción de Gracias de 1976.  Para celebrar dicho evento se montó un cartel de invitados entre los que estuvieron Ronnie Hawkins, Muddy Waters, Eric Clapton, Neil Young, Joni Mitchell, Van Morrison...  Martin Scorsese fue quien filmó el acto para la posteridad bajo el título The Last Waltz.  Se estrenó al mismo tiempo que se publicaba un LP triple con la banda sonora de la actuación.  A partir de ese momento la historia de The Band quedaría sosteniendo el recuerdo activo de sus miembros porque algunos de ellos comenzarían labores en solitario como fue el caso de Robbie Robertson


que en 1987 publicaba su primer LP bautizado con su nombre y apellido y rodeado de colegas de labores musicales, buenos amigos entre los que estaban Daniel Lanois, los cuatro miembros de U2, Peter Gabriel...  Robbie Robertson es un disco lleno de entusiasmo, de fuerza vital, de energía, y como muestra este Sweet Fire of Love que recupera el Cíclope.



Robbie Robertson nacía el 5 de julio de 1943 en Toronto, Canadá; fallecía en Los Angeles, el 9 de agosto de este 2023.  Un campo en el que se movió de forma cómoda fue en el del Cine.  Apareció en varios documentales sobre música y como compositor de bandas sonoras originales lo hizo en cuatro ocasiones, en cintas de su amigo Martin Scorsese: en El rey de la comedia, 1982, El color del dinero, 1986, El irlandés, 2019 y la última, Los asesinos de la luna, 2023.  De este score escuchamos el fragmento titulado Salvation Adagio, con el  compositor a la guitarra eléctrica.



Nos vamos a servir de la atmósfera relajada de ese fragmento del score de la película Los asesinos de la luna, original de Robbie Robertson, para continuar por ese camino.  Pasamos a través de las puertas que aparecen en la ilustración anterior, parte del diseño del libreto que acompaña la edición de I / O, el álbum recién publicado de Peter Gabriel.



Su nuevo trabajo se ponía a la venta el pasado día 1 de este mes de diciembre.  Hacía 21 años que no veía la luz un disco con material nuevo de nuestro hombre.




Lo anterior data del 24 de septiembre de 2002, el álbum Up.  




Ocho años después aparecía Scratch My Back, 2 de marzo de 2010, un disco con 12 pistas, 12 versiones de temas originales de David Bowie, Paul Simon, Randy Newman, Neil Young, Lou Reed, David Byrne, Radiohead, Arcade Fire, Stephin Merritt, Bon Iver, Elbow, Regina Spektor...  El plan de interpretar una colección de canciones favoritas con la idea de que los artistas versionados le devolvieran el favor interpretando sus canciones, las de Gabriel, no se llevó a cabo.  Todas las versiones las realizó utilizando el piano y una orquesta de cuerdas, más la voz, claro.


Un año después, el 10 de octubre de 2011, veía la luz New Bloodun álbum en el que la orquesta envuelve las versiones de sus propias canciones.  Retoma su discografía y hace una selección de canciones que vuelve a interpretar.  Algunas composiciones no son considerablemente diferentes, tonalmente hablando, a las versiones originales como ocurre por ejemplo con el material del álbum So, canciones como Mercy Street no suenan distintas, muy diferentes.  Otras, sin embargo, las composiciones muy reelaboradas, como San Jacinto, tienen un reordenamiento sorprendente que parece que le da a las canciones una nueva estructura.


Y así llegamos hasta el 24 de abril del año 2012, fecha de aparición del álbum Live Blood, un disco que captura un concierto celebrado en el Hammersmith Apollo de Londres en marzo de 2011.  No aporta nada nuevo este disco, es sencillamente una vuelta de tuerca más, en esta ocasión en vivo y en directo, del contenido re-interpretativo de New Blood, más el trabajo anterior a ese, Scratch My BackGabriel se encuentra cómodo con las sutilezas que encuentra trabajando con una orquesta y así continúa hasta llegar a nuestros días.  Desde el año 2012 hasta hoy el tiempo transcurrido ha contemplado a nuestro hombre trabajando, colaborando con proyectos e incluso recogiendo actuaciones en vivo que han ido publicándose en formato virtual sin que se jayan materializado en forma de CD o vinilo.  Excepto este álbum nuevo aparecido con el nombre I / O  que sí tiene una proyección comercial física y cuya portada es esta foto




I / O  está formado por 12 cortes, 12 canciones que, en el transcurso de este año 2023, Peter Gabriel ha ido publicando como sencillos, singles individuales, cada una en dos mezclas separadas, una Bright y otra Dark, y luego realizó una gira con el disco completo, todo antes de su lanzamiento en este mes de diciembre.  Un goteo constante de sencillos no ha generado expectativas para el nuevo trabajo.  No tanto, al menos, como para acostumbrar a su audiencia a escuchar nueva música hecha por él, permitiendo concentrarse en la audición de una serie de canciones antes de meterse uno de lleno en un álbum que tiene su propio e intrincado mecanismo de relojería, que hay que dedicarle tiempo a la escucha.  Gabriel se ha tomado su tiempo creando I/O, por lo que escucharlo despacio, con atención, permite que el disco se desarrolle, se abra y se sitúe en la distancia, entre las décadas que han pasado.  El disco es el que sigue cronológicamente al álbum Up de 2002, tanto en la cronología como en el contenido: la orquesta de cuerdas ha llegado para asentarse y a ella recurre en los dos tipos de mezclas utilizadas, I/O Bright-Side Mixes y I/O Dark-Side Mixes.  Ahora viene la gracia: los discos con las dos mezclas se venden cada uno por separado, o ambos juntos, o ambos juntos más un Blue Ray con imágenes elaboradas, tratadas por el mismísimo Gabriel que, como imagino que sabrás, siempre ha estado muy al día en cuestiones de avances técnicos tanto en sonido como en imagen.  En total hay cuatro versiones del disco en Europa y otras cuatro en Estados Unidos.  En Japón, cuyo mercado fonográfico es independiente del resto del mundo, no sé cuántas versiones habrá, pero que son distintas eso tenlo por seguro.  Si te preguntas cuál es la portada en un caso como en otro, Estados Unidos y Europa es muy fácil: todas son iguales, la misma foto reproducida más arriba (la cara de nuestro hombre con las manos a ambos lados), lo que varía es el color de la tira de la izquierda




Si adquieres en Europa el disco doble, Bright-Side más Dark-Side Mixes, el color es verde.  Después cambian, dependiendo del contenido: rojo, azul, rosa...  En estados Unidos se repiten algunas tonalidades pero un poco más oscuras.  Y lo que es importante, ¿merece la pena el disco nuevo?  Para que te hagas una idea, aquí en Cíclope 3.0, hoy escuchamos tres temas de las mezclas Bright-Side Mixes.  Estas se caracterizan por una preponderancia de la orquesta frente a elementos e instrumentos electrónicos; la otra mezcla, la Dark-Side Mixes, son las mismas 12 canciones pero con más presencia de lo electrónico frente a lo acústico de la orquesta de cuerdas.



  

El disco es Peter Gabriel, un Gabriel sereno que no ha perdido el buen gusto a la hora de componer e interpretar.  Siempre me ha llamado la atención lo que ha hecho, cuando estuvo con Genesis y en solitario, pero no soy incondicional de nadie, ni de él ni de Peter Hammill, probablemente el músico relacionado con el Rock que más admiro.  El trabajo de Gabriel cuenta con la intervención de colaboradores habituales en sus grabaciones: Brian Eno como productor junto a Gabriel del sonido, Tony Levin en la guitarra de bajo...  La Orquesta New Blood como eje central.  Le doy un Sí al nuevo disco de Peter Brian Gabriel con el que volveremos en otra ocasión.  Ahora, aprovechando la calma que nos ha dejado continuamos por esas formas con el sonido de una banda originaria de Brooklyn, Nueva York, un proyecto conocido con el nombre de Beirut.




Beirut, hasta el momento, comenzó siendo un septeto para asentarse como sexteto y para llegar a ser, actualmente, el proyecto de un hombre, su fundador, Zachary Francis Condon (en la foto, con un ukelele en las manos), natural de Santa Fe, en Nuevo México.  Publicaron por primera vez un disco en el año 2006.  En 2015 el sello discográfico independiente escocés 4AD editó lo que en ese momento fue su cuarto álbum.  Bajo dicho sello publicaron también el siguiente trabajo, Gallipoli, de 2019, y ese año llegaron las complicaciones.  Estaban de gira, promocionando el disco de 2019, y Zach Condon cayó enfermo.  Problemas de garganta, problemas emocionales (separación de su pareja) forzaron el final de la gira y Condon tomó una decisión: retirarse, sólo, para mejorar tanto física como psíquicamente.  Pero, retirarse dónde, ¿en Albuquerque, en Nuevo México?  No, no.  Un poco más lejos.  Y se marchó a Noruega, al municipio de Hadsel, en concreto al pueblo de Stokmarknes.  Se ubicó en una cabaña, cargado con un equipaje poco ligero: un equipo de grabación, incluido un órgano de bombeo prestado, dos equipos de sintetizadores modulares, una vieja grabadora y su trompeta.  No se olvidó del ukelele.  Por invitación de un lugareño, también tuvo acceso a un órgano de iglesia de principios del siglo XIX.    



Zach Condon trabajando en ese órgano 


En una parte del mundo con vistas a las montañas y auroras boreales, donde el sol nunca sale por el horizonte en invierno, se dedicó a componer y a grabar.  Su actividad de grabaciones se distribuye en un triángulo formado por Albuquerque, Brooklyn y Berlín.  Cuando volvió de su estancia en la isla noruega grabó él sólo el sexto álbum de Beirut bautizado con el nombre de la localidad noruega donde estuvo retirado, Hadsel.


Es un trabajo extraordinariamente sereno frente a la música que desarrolló en el álbum de presentación que realizó Beirut en 2006, Gulag Orkestar, un disco que, para que te hagas una idea por si no lo conoces, suena así en esta composición titulada Postcards From Italy.


El primer disco de Beirut es toda una declaración de principios.  Reúne todo lo que llamó la atención de su fundador cuando se mete en los estudios de grabación para organizar las composiciones escritas por él con 19 años: música folklórica de Europa del Este, trompetas de mariachis, ritmos latinos plagados de mandolinas, de sonidos tintineantes de la familia de instrumentos de cuerda,  acordeones, trompetas, percusión.  Condon no está interesado en meras aproximaciones de formas tradicionales, él y sus amigos utilizan los instrumentos folclóricos principalmente como texturas que suenan realmente bien, fondos exóticos para las melodías folk que plantean.  Más arriba he indicado que la banda fue un septeto, después un sexteto...o un dúo, como sucedía en el álbum de debut de Beirut: según se puede apreciar en la foto de la portada del disco, entonces el proyecto era un jovencísimo Zach Condon y la violinista Heather Trost.  La elasticidad de la nómina de componentes es algo manifiesto desde que comenzaron.  Para despedir a Beirut lo hacemos recuperando un corte más de su último trabajo, Hadsel, en este caso uno que lleva por título el nombre del pueblo donde estuvo retirado el fundador del grupo, Stokmarknes.  

Nos queda poco tiempo, el justo para escuchar al menos una canción que va a ser una de una banda irlandesa original de la ciudad de Dublín.  Responden al nombre de Falkum y lo hemos escuchado una vez por lo menos en este año que se dirige hacia su final.


Los hermanos Ian y Daragh Lynch (primero y segundo por la izquierda), formaron la primera encarnación de la banda a principios de la década de 2000, interpretando una mezcla de canciones tradicionales junto con sus propias composiciones con un estilo claramente folk con aura punk.  Haciendo un guiño a su apellido, llamaron a la banda Lynched y, tras sumar a los miembros Cormac Mac Diarmada (primero por la derecha) y Radie Peat, (la chica de la foto) comenzaron a enredar los hilos del tapiz de su música con otras perspectivas.  Lo primero que hicieron fue cambiar el nombre del grupo, entre otras cosas por el sentido siniestro de la traducción: Lynched significa Linchado/a, precisamente algo que aparecía en las letras de algunas de las canciones americanas tradicionales que tocaban donde se recogían linchamiento de negros.  Se cambiaron el nombre a Lankum, tomándolo de la canción del viajero irlandés John Reilly, Jr. False Lankum.  Abrazaron aún más la música tradicional de su Irlanda natal, enriqueciendo las bases de sus composiciones incorporando elementos de punk, krautrock e incluso psicodelia.  Lo mezclaron todo en el crisol de su creatividad que se volvió aún más colorista, ilustrada por el sonido central que se basaba en armonías de cuatro voces con la inclusión de instrumentación como flautas de uilleann, las gaitas características irlandesas, violín, concertina y guitarra.  Desde el comienzo del siglo XXI habían grabado un par de discos con el nombre de Lynched, discos que no se sumaron a su discografía como Lankum.

Con el nombre nuevo publicaron en autoedición un primer álbum, Cold Old Fire, en 2014 (foto de la portada a la izquierda).      Un par de años después  consiguieron firmar un contrato con el veterano sello discográfico británico independiente Rough Trade, donde apareció Between the Earth & Sky en 2017, valorado y bien acogido por la prensa especializada británica.  La producción del grupo continuaría bajo el sello Rough Trade.  En 2019 aparecía The Livelong Day y en este 2023 salen dos álbumes, uno, de reciente publicación (el 24 de noviembre), grabado en vivo el 31 de mayo de este año en Vicar Street, Dublín y editado con el nombre Live in Dublin,

el otro, False Lankum, grabado en estudio y publicado el 24 de marzo de este 2023, es el que nos sirve para cerrar el programa, en concreto el tema titulado The New York Trader.  Volveremos con Lankum porque es un grupo muy interesante, con canciones largas que merecen la pena que las escuchemos, pero será en otro momento.  Por hoy, nos despedimos.
Espero que te guste el programa.

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